JOYERÍA TRADICIONAL

Como es bien conocido por todos los estudiosos del tema, el occidente peninsular disfruta de una tradición especialmente rica en lo que a joyería se refiere.

En los alrededores de la comarca de “Los Valles de Benavente”, dentro de un radio de poco más de 100 Kms. en línea recta, se localizan algunos de los más antiguos y reputados centros de producción de alhajas de toda España, como es el caso de Astorga, Salamanca o Medina del Campo. Los núcleos indicados albergan talleres de orfebrería y de platería abundantemente documentados desde finales de la Edad Media, que han dado lugar a producciones muy características y diferenciadas.

No es de extrañar, por tanto, que la vestimenta tradicional de la comarca se complemente con una gama de aderezos de joyería muy peculiar, que conjuga elementos procedentes de todas las escuelas anteriormente citadas. Muchas de las piezas se continúan realizando todavía con técnicas que apenas han experimentado variación desde hace siglos, como son las empleadas para ejecutar las labores de filigrana que adornan las arracadas de calabaza o el exterior de muchos relicarios.

  1. Moza con la pechera adornada por diversas ristras de corales, agrupados conformando el denominado “Centro”. Luce en las orejas grandes pendientes de candao.
  2. Collar de cuentas de pasta del que penden tres medallas, dispuestas de forma alternada a la manera tradicional.
  3. Arracadas de calabaza. En la parte inferior de las mismas se aprecian multitud de pequeños colgantes, que representan el espíritu santo y las lenguas de fuego.
  4. Pendientes de candao de plata sobredorada, con cabujones de piedras verdes y rojas engarzados.
  5. Pendientes del mismo tipo de los anteriores, aunque elaborados según un diseño diferente.
  6. Duro de plata de los denominados “Amadeos” transformado en medalla.
  7. Medalla de plata con imagen de una Virgen.
  8. Relicario antiguo.
  9. Patena de plata con figura de Cristo crucificado en su interior. Los renombrados “Cristos preñados” son piezas similares a la fotografiada, pero con la superficie central abombada hacia el exterior.
  10. Conjunto de joyas y aderezos antiguos propiedad de la familia Hidalgo-Riesco, que fueron amablemente cedidas de forma temporal para la realización del reportaje fotográfico.

La investigadora de la joyería zamorana Lena Mateu Prats, según se recoge en una publicación editada hace algunos años por la Excma. Diputación Provincial de Zamora, diferencia dos zonas de aderezos a nivel provincial, delimitadas por el cauce del río Órbigo. En la margen occidental del río predominarían las piezas de plata de grandes dimensiones (arracadas de calabaza, candaos, bollagras gigantes, cristos preñados, patenas, etc.). En la orilla oriental cobrarían preponderancia las piezas finas de oro rebajado, a veces combinadas con aljófares.